Habla inglés más fluido con estos 4 consejos

Puede que entiendas perfectamente el inglés cuando te hablan o que incluso lo escribas perfectamente, pero hablarlo fluidamente puede ser uno de los retos que más te intimiden. La verdad es que aprender la pronunciación de un idioma nuevo puede ser complicado, pero con los tips adecuados puedes convertirte en un experto.

Como todo, lo más difícil puede ser dar el primer paso. ¿A quién no le da miedo hablar un idioma nuevo en público? ¡Es normal! Una vez que empieces a hacerlo te darás cuenta que no era tan terrible como pensabas y es bastante probable que los nativos incluso quieran ayudarte a mejorar.

Ten en cuenta que la mejor forma de perfeccionar tu pronunciación y fluidez en un idioma es hablándolo. Si no sabes cómo empezar hoy te ayudaremos con unos consejos súper sencillos que puedes aplicar hoy mismo:

1. Piensa en inglés

Esto es clave para dominar cualquier idioma, sobre todo el inglés. ¿Por qué? Te ayudará a reaccionar mucho más rápido y dar respuestas mucho más coherentes. Seguramente te ha pasado que cuando te hablan en inglés primero traduces lo que te han dicho al español, piensas la respuesta en ese mismo idioma y luego la traduces para responder. Suena complicado, ¿verdad?

Si te obligas a hacer todo un proceso mental de traducir en dos idiomas lo que quieres decir es mucho más probable que cometas errores o que te trabes. ¡Piensa en inglés! Cuando estés solo, cuando quieras pedir comida, cuando repases tu día o tus pendientes; una vez que te acostumbres a pensar en inglés, podrás hablarlo con mayor fluidez.

Pensar en inglés también te ayudará a hablarlo con mayor naturalidad, tal como lo hacen los nativos y no como te enseñan en los libros. Te esforzarás mucho menos para entender y tus respuestas saldrán solas.

2. Entrena tu oído

Si tu oído no se acostumbra a escuchar el inglés es muy poco probable que lo entiendas cuando te hablen y que mejores tu pronunciación. Para esto puedes escuchar música, ver películas o videos, escuchar la radio, todo en inglés y estando bien atento a las palabras. Cuando menos te lo esperes te darás cuenta que puedes entenderlo todo y hablarlo sin problemas.

Incluso puedes estar atento a todo lo que escuches en la calle. Escribe las frases nuevas y busca su significado en internet o si estás hablando con un nativo no tengas miedo de preguntarle las cosas que no entiendas. Tal como mencionábamos más arriba, si aprendes del mundo real, tu inglés será muchísimo más natural e ¡incluso podrás hablarlo como un nativo!

3. Habla contigo mismo

No, no estamos locos. De hecho, hablar contigo mismo es una excelente manera de practicar tu inglés. Cuando estés solo, di tus pensamientos en voz alta, incluso puedes simular una conversación o leer cualquier cosa que tengas a la mano. Así podrás trabajar tu confianza: puedes corregirte todas las veces que sea necesario sin miedo a que otra persona se burle o te juzgue.

Lo importante es que pierdas el miedo de expresarte en otro idioma, una vez que tengas confianza en ti mismo no habrá quien te detenga. ¿Te contamos un secreto? Si hablas con seguridad, es muy poco probable que noten tus errores.

4. Cópiate de un nativo

Puedes aprender muchísimo de pronunciación y fluidez copiándote de algún hablante nativo. Seguro tienes algún famoso o celebridad favorita que habla el inglés tal como tú quisieras, de ser así, busca grabaciones o entrevistas e intenta imitar la manera en que habla.

O mejor aún, si tienes algún amigo nativo puedes pedirle que te ayude a practicar tu pronunciación y también podrá enseñarte frases comunes que facilitarán la manera en que te comunicas.

Lo importante es que seas constante, si no practicas tu inglés con regularidad es muy poco probable que logres la fluidez que tanto quieres. Encuentra nuevas maneras divertidas o creativas de hacerlo, que te motiven a seguir aprendiendo. Cuando seas un experto hablándolo, te darás cuenta que todo el esfuerzo habrá valido la pena e incluso podrás tomar un examen de certificación si deseas estudiar en EEUU. Al final, se trata de darle una oportunidad a aprender un idioma nuevo.